Las gafas del músico estaban en posesión de Alan Herring, un chofer que trabajó para los Beatles. Fueron vendidas por la casa Sotheby’s de Londres a un comprador cuyo nombre no trascendió. A casi cuarenta años de su asesinato, John Lennon sigue dando que hablar. En esta ocasión, el músico fue noticia por la subasta de un par de sus icónicos anteojos, que fueron vendidos en 165 mil euros (137 mil 500 libras).
Si bien el nombre del comprador no trascendió, sí se supo que el dueño de las gafas era Alan Herring, un exchofer de los Beatles, quien en una carta adjunta explicó cómo llegaron a su posesión los lentes.
Lennon, escribió Herring, había dejado sus lentes -por el marco rigurosamente redondo- en el asiento trasero del auto de Ringo Starr en el verano de 1968.
«Llevé a John con Ringo y George en el Mercedes de Ringo y los traje a la oficina», continuó en la carta. «Cuando John salió del auto, noté que había dejado estas gafas de sol en el asiento trasero y que se había salido una lente y una patilla-continuó Herring-. Le pregunté a John si quería que los llevara a reparar. Él me dijo que no me preocupara porque eran solo para el look!…». Y el exconductor agrega: «Nunca los reparé, los guardé como estaban, tal como los había dejado John».
Herring explicó luego que comenzó a trabajar para los Beatles en 1967, cuando George Harrison lo contrata como jardinero para su casa en Surrey. Posteriormente se convirtió en su chofer y asistente personal, hasta que Harrison se fue en un largo viaje a India. En ese momento Starr le ofreció un trabajo como chofer.
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