Una antena ubicada en cercanías del arroyo Ayuí Grande, camino hacia el barrio Mendieta, fue atacada por los cacos este fin de semana de cuarentena y la dejaron inactiva.
El hecho habría ocurrido el lunes por la noche, cuando vecinos avisaron a la policía que en la torre, operada por Telecom, se sentían fuertes ruidos de mazazos y dobladura de chapas.
La llegada de la policía se dio alrededor de hora y media después de ser llamada y no encontraron a nadie.
Los técnicos de Telecom, que en la mañana de ayer tuvieron que arreglar la torre para mantener la calidad del servicio, dijeron a EL SOL que el robo había sido de varios cables, algunos de cobre y otros de fibra óptica y dos pack de baterías del interior de la caseta.
Agregaron que el valor del material sustraído es alto pero no tiene valor de reventa para los cacos pues no son materiales que puedan revenderse.
En tanto, los vecinos que avisaron a la policía demostraron su preocupación por la demora en acudir para dar con los cacos dentro de las instalaciones y llevarlos detenidos.
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